martes, 9 de febrero de 2010

Anís

Un fulano del bar dijo
-¡Ey! usted, don Antonio, venga con nosotros a tomarse un guarito- Don Antonio, un hombre buen mozo, alto y de voz gruesa responde.
-No señor, a mi aléjeme ese demonio de la garganta-
-Hay don Antonio, no se ponga con pendejadas de viejo gruñón y amargado- le respondió aquel fulano del bar.
-No son pendejadas de viejo gruñón, simplemente no quiero tomar de ese líquido cuyo objetivo es quemar la vida y los sueños de las personas que de verdad importan- dijo Antonio con los ojos irrumpidos de lágrimas.
El fulano dejó la botella de guaro en la barra y se acercó a don Antonio sigilosamente, lo miró a los ojos y le preguntó – ¿Puedo saber porque habla así de la bebida?
Antonio secó sus ojos, miró a los ojos de aquel fulano y dijo – Si usted quiere saber, le contaré, porque detesto esa maldita bebida- Antonio se puso de pie, hizo un silencio ensordecedor de aproximadamente cinco minutos y se dispuso a contar su historia.
- ¿Ustedes se acuerdan de mi Lucia? Aquella mujer que los hombres miraban pasar de tres en tres, viéndole lo que tenia de dos en dos; Esa mujer de rostro perfecto y cuerpo seductor, mi Lucia. Lucia murió hace unos ocho años aproximadamente en el parto de mi única razón de vida, mi hijo. Caí en el alcohol por desgracia mía, empecé a ahogar mi miedo, mi tristeza y mi ira en el aguardiente. Un día estaba en mi ranchito ahogando mis penas en alcohol, me dormí tres minutos a lo mucho, levante mi cara y la vi, vi a mi Lucia, la vi más hermosa que nunca, fue un momento perfecto, ella no menciono ninguna palabra, solamente sonrío y luego me dejo de nuevo; no les miento, llore toda la noche y luego me dormí. Cuando me levante al otro día me acerque al muro donde se había aparecido mi Lucia, lo toqué, lo detallé y no vi nada extraño. En ese momento me di cuenta que la única manera de volver a estar con mi Lucia era a través de aquella bebida a base de anís, azúcar, alcohol y veneno. Fue mi rutina por días, semanas y meses, una de esas noches mi hijo salió de su habitación en la noche, me vio abrazando aquel muro, se acerco a mi, me tomo de la pierna y me pregunto - ¿Qué haces papá? ¿Por qué abrazas de esa manera ese muro sucio y frío?- me di la vuelta y le di una bofetada, cayó al suelo y con miedo me preguntó -¿Qué pasa papá?- lo mire a los ojos y le dije -En ese muro esta tu mamá, la veo todas las noches- el pequeño desconcertado e indignado me reclamó – ¿Como es posible que tu puedas ver a mi mamá y yo no? Yo no la conozco, te exijo que me digas como puedo conocerla- Tal vez en ese momento hice lo más estupido de mi vida, le comenté que con algunos tragos bastaba para verla todas las noches, cuando le dije esto caí ebrio al suelo y quede inconciente durante diez horas aproximadamente. Cuando me levanté de aquella resaca me levanté con el dolor de cabeza más brutal de mi vida, miré a mi alrededor, miré hacia el muro y estaba mi hijo rendido e inconciente en el suelo, tenia espuma en su boca y sus mejillas estaban moradas, lo tome en mis brazos, acerque mi rostro a su boca, ya había dejado de respirar, miré su mano, lo único que había en ella era esa maldita caja de guaro que superaba en tamaño su inocente manito, el quería ver a su madre y lo único que vio fue la decepción y el sufrimiento-. Ahora entienden porque simplemente prefiero sentarme a ver pasar la vida, esperando a que la muerte llegue y me lleve a donde los seres que mas amé y a la vez asesiné por culpa del maldito Anís.- Don Antonio se fue caminando lentamente hacia la puerta del bar el cual se encontraba en un silencio escalofriante, cerró fuertemente la puerta del bar. Dicen que lo último que se escucho esa noche, fue un cañonazo que salio del ranchito de don Antonio.

Basado en una historia de tradición oral Colombiana.
Para algunos que creen manejar el alcohol
Alejandro Lotta “Machin”

1 comentario:

Jose Ramon Santana Vazquez dijo...

...traigo
sangre
de
la
tarde
herida
en
la
mano
y
una
vela
de
mi
corazón
para
invitarte
y
darte
este
alma
que
viene
para
compartir
contigo
tu
bello
blog
con
un
ramillete
de
oro
y
claveles
dentro...


desde mis
HORAS ROTAS
Y AULA DE PAZ


TE SIGO TU BLOG




CON saludos de la luna al
reflejarse en el mar de la
poesía...


AFECTUOSAMENTE
MACHIN


ESPERO SEAN DE VUESTRO AGRADO EL POST POETIZADO DE CHOCOLATE, EL NAZARENO- LOVE STORY,- Y- CABALLO, .

José
ramón...

KISS